¿Conoces el correcto etiquetado del jamón Ibérico?
Es arto sabido que la picaresca nacional ha llevado a la mesa supuestos manjares bajo el nombre del mejor Jabugo. Y muchas veces lo que en realidad se ha servido ha sido un loncheado de algún jamón de pueblo con buen aspecto o incluso el Mangalica, muy presente en banquetes y bocadillos “gourmet”, emulando a nuestro inigualable jamón Ibérico.
En enero del año 2014, tras diversas demandas y quejas del sector del jamón, el Gobierno decidió crear una nueva normativa para la correcta diferenciación de los tipos de cerdo, su alimentación y su manejo que aparecen en la elaboración de un jamón ibérico.
Así surgieron las cuatro etiquetas en forma de brida que por ley deben aparecer en todas las piezas de jamón, paletas, lomos y cañas comercializadas en España y que nos ayudan a distinguir la calidad del producto que vamos a comprar. La brida se coloca en la pieza de carne en el matadero, y no puede quitarse del producto en ningún momento del proceso de comercialización.
La etiqueta negra señala un jamón procedente de un cerdo 100% raza ibérica, criado a base de bellotas y pastos en la dehesa, sin recibir pienso. Es la máxima calidad que puede alcanzar una pieza.
El segundo escalón lo supone la etiqueta roja. Va colocada en cerdos de raza ibérica cruzados con la raza Duroc, pero que igualmente han sido alimentados con bellota en la dehesa.
La brida verde (o azul en algunos casos) nos permite conocer que estamos ante un cerdo ibérico criado con pienso y cebo, pero al que se le ha permitido estar suelto en el campo de manera libre.
Por último está la etiqueta blanca, que nos presenta un cerdo ibérico criado de forma intensiva en granja y con pienso.
Tanto en las etiquetas rojas, verdes/azules, como blancas debe aparecer el porcentaje de raza ibérica del cerdo, que en ningún caso será menor al 50%.
Con este nuevo etiquetado se espera acabar con el fraude que existe dentro del mundo del jamón ibérico y las etiquetas confusas que pueden hacer creer que se está comprando un producto cuando en realidad es otro de menor calidad.
Las cinco denominaciones de origen protegidas de jamón que existen en España: Guijuelo, Teruel, Huelva, Dehesa de Extremadura y Los Pedroches, ya cumplen con esta normativa que permite diferenciar sus productos, manteniendo siempre la mayor calidad.
En Palma existen muy buenas tiendas especializadas donde poder adquirir un buen jamón Ibérico con garantías, sin embargo creo que no está de más que se proteja y se controle la calidad de los productos españoles con Denominación de Origen en beneficio de todos y especialmente del consumidor final.
En la foto se puede ver un Bellota cien por cien cortado a cuchillo y al momento en Asador Bolixe donde siempre nos gusta tener los productos de mejor calidad.
Fuente: TodoEspaña
Foto: Asador Bolixe Cocina Esencial